REAL MADRID VENCE A BARCELONA EN LA FINAL DE LA COPA DEL REY

REAL MADRID VENCE A BARCELONA EN LA FINAL DE LA COPA DEL REY.

ANÁLISIS. APUNTES TÁCTICOS DEL JUEGO.

“En tu cancha diaria, ¿juegas a la defensiva, tienes talento organizador, vas al ataque o esperas el contraataque”?

Se dice que como se vive se juega. Hoy usted estará feliz por el triunfo de Mourinho o estará deprimido por la derrota de Guardiola. Son dos posturas diferentes pero válidas en el fútbol. Todos queremos ganar. Unos por el camino de la estética, la belleza del juego, la técnica, la armonía colectiva, otros apuestan por lo práctico, hacer lo que se necesita hacer para ganar.

Mourinho explicó que “puede que haya gente que no esté de acuerdo porque para mucha gente un buen encuentro de fútbol es con posesión de balón. Para mí un gran partido puede tener un gran trabajo defensivo, una gran contragolpe y otras muchas cosas”, aclaró para justificar su modo de jugar en esta final de Copa del Rey.

También añadió “que ganar títulos es siempre bueno. "Hace poco días alguien me llamó un entrenador de títulos -Cruyff- y no un entrenador de fútbol, gracias porque me gusta”.

Hay que recordar que Mourinho ha ganado cuatro copas en cuatros países diferentes.

Y dijo que “Este partido no tiene nada que ver con el próximo ni con el anterior. Por ganar no estamos ahora por arriba porque cada partido es una historia”, avisó de cara a las semifinales de la Liga de Campeones.

También aprovechó y envió otro mensajito a parte de la prensa “Algunos fenómenos escribirán muchas cosas, pero yo me limito a trabajar. Estoy cansado pero contento”.

"Madrid estuvo mejor en el primer tiempo. Pepe una de cabeza en el palo que no ha podido ser y Cristiano Ronaldo en dos oportunidades pudo anotar y Barsa en el segundo estuvo mejor, varias opciones que salvó Casillas, aunque en el minuto 90 el arquero Pinto hizo una gran atajada", finalizó su declaración.

Madrid en el primer tiempo cometió pocos errores, muy aplicados, concentrados cada uno de sus jugadores en sus obligaciones tácticas, aunque más defensivas que ofensivas, hasta el punto de que Barsa no llegó nunca con un tiro directo sobre Casillas, algo inusual y muy llamativo pues es catalogado como el mejor equipo ofensivo del planeta.

Ese primer tiempo se jugó como pretendía el Real Madrid. Obligando a su rival al toque en zonas sin importancia en donde no generó peligro nunca.

Impuso las reglas del juego y Barsa jugaba con las mismas ideas de siempre pero sin acertadas ejecuciones merced al trabajo solidario, agresivo y organizado del Madrid.

Mascherano por Puyol en el centro de la defensa fue la principal novedad en el Barcelona, mientras que el Real Madrid situó en el centro del campo a Xavi Alonso por detrás de Pepe y Khedira, en una línea de medios muy agresiva . Ozil fue titular por banda, sin poder dar una actuación importante,aunque trabajó controlando la proyección en ataque de Marcelo. Di María por la otra banda hizo un gran trabajo de contención sobre Alves, quién no pesó ofensivamente.

Madrid: presión sobre la pelota con gran intensidad, recuperación más lanzamientos largos para evitar la presión del Barsa e intención de contraataques rápidos.

Fue un primer periodo trabado y con poca continuidad en el juego como consecuencia de las numerosas faltas tácticas, discusiones, fricciones, enredos, demoras, interrupciones, con el objetivo logrado de sacar al Barsa de su estado emocional sereno que requiere para desplegar continuidad en el dominio del juego con posesión de pelota. En verdad hubo poco fútbol.

El partido obligó a un despliegue físico exigente por parte del Madrid para contrarrestar el juego de posesión de Barsa y que este no lograra vulnerar con éxito el funcionamiento defensivo bien organizado de su rival.

Al final de los primeros 45 minutos: tres ocasiones de gol para Madrid con Pepe de cabeza en el palo y dos falladas por Cristiano Ronaldo. Por ninguna del Barcelona, algo insólito en la era Guardiola.

Menos intenso se mostró el Real Madrid tras el descanso al tiempo que el Barcelona empezó poco a poco a dejarse ver y a manejar el partido con sus armas habituales de toque, posesión y profundidad. Barsa hacía correr la pelota y Madrid corría detrás de la pelota.

Es cierto que lo hacía con menos llegada a puerta de lo habitual, pero obligaba a Madrid un gran desgaste. El segundo tiempo se jugaba el partido que quería el equipo de Pep Guardiola. Recién a los tres minutos Barcelona construyó la primera pared al borde del área del Madrid, algo increíble. Al Real Madrid, sin la pelota, sólo le quedaba la opción del pelotazo para un contraataque.

El encuentro se convirtió en un monólogo del Barcelona y el Real Madrid cada vez tenía menos que ver con el equipo intenso de la primera mitad. Además, en el minuto 69 una excelente jugada de Messi acabó en gol de Pedro, pero el árbitro lo anuló por fuera de juego de Villa.

Ante el toque del Barcelona, al Real Madrid sólo le quedaba el orden defensivo, que nunca perdió, y los balones largos, que nunca aprovechó con decisión.

Iker Casillas se erigió como gran figura evitando varias veces con extraordinarias atajadas el gol de Barsa. Al final un Barsa llegando con impotencia, insistiendo, pero sin concretar. Al final pudo ser del Madrid pero Pinto evitó el gol con una gran salvada.

En la prórroga Madrid han estado compactos pero cansados y Barcelona inconsistente. Dijo Mou en la rueda de prensa que en la prórroga el que marca, psicológicamente se queda por arriba y normalmente suele ganar el partido.

Cristiano tuvo el gol en una contra que acabó con un remate raso y potente (m.98), pero poco después ante centro de Di María gol de Cristiano en un excelente cabezazo. El excelente remate valió el título.

Barcelona insistió lo últimos minutos sin claridad, sintió mucho el gol en contra, su estado de ánimo fue decayendo, y terminó empujando sin claridad en busca del empate.

Al hacer un análisis individual por parte del Barcelona se nota que muy pocos jugadores pasan el exámen: Iniesta en el segundo tiempo, Sergio Busquets por su combatividad, un poco Xavi en el segundo tiempo, Pinto cuando fue exigido a excepción de la jugada de gol, era imparable ese cabezazo. Y pare de contar. Por parte del Madrid: Casillas, Carvalho, Ramos, Cristiano por su gol y nada más, demasiado poco para lo que es el portugués.
Barcelona se nota hace rato viene en línea descendente y Madrid es un equipo en construcción que avanza al ritmo y al estilo de su singular D.T. Le guste o no le guste a la mayoría de la gente.

El plan de Mou fue impecable. Queda la semifinal de la Champions League para saber si el Madrid ha encontrado, por fin, no ya la medicina para vencer, sino para desactivar al que es su verdadero enemigo, el estilo de juego del Barcelona. Ha sido un triunfo Madridista que hace pensar en que puede venir la recuperación del poder futbolístico ante su archienemigo. Devuelve quizá la cordura a una rivalidad que siempre tiene que medirse en el juego, donde los enemigos te hacen mejor.