jueves, 30 de agosto de 2018


ENTREVISTA A MIGUEL CHAMORRO.

Gracias a 
ELFÚTBOLDELACALLE.

-. Buenas tardes Miguel, lo primero de todo darte las gracias por dedicarme tu tiempo y acceder a esta breve entrevista.
-. Acabas de publicar tu libro, “La preparación futbolística desde la incertidumbre”, ¿qué te lleva a la creación de este libro?  Yo que lo he leído, el libro está lleno de interrogantes, ¿les has encontrado respuesta?
La verdad es que nunca pensé en escribir un libro, sino que, las diversas vivencias e interrogantes que iban surgiendo en mi practicidad a lo largo de estos años, comencé un día a plasmarlos en papel, a desarrollar pequeños artículos personales, y a partir de ahí, tras un tiempo…conseguí darle forma y decidí desde el deseo de compartir que siempre he tenido, contactar con la editorial FutboldeLibro, a la que agradezco su confianza para la publicación.


En cuanto a los interrogantes, he de decir que para mí, “Preguntarse el porqué de las cosas, me parece uno de los mayores momentos de aprendizaje y comprensión que existen”, actualmente sigo intentando encontrar respuestas a tanta incertidumbre, en un deporte impredecible e irreversible, me parece demasiado arriesgado dar respuestas por únicas y verdaderas, el fútbol es contextual.

-. Si tuvieses que hacer un breve resumen al lector que está interesado en el libro y está pensando en comprarlo, ¿qué le dirías?
Alejado de letras y palabras, esquivando todo lo protocolario, al iniciar esta aventura, os invito a reflexionar, a dudar para creer y creer para crear.  Y desde esa inquietud, momentos de sentimientos que me proporcionan el olor a césped, el color verde, la incertidumbre que puedan generar de las tareas de entrenamiento, el pitido inicial y final, así como las relaciones que se pueden provocar en el contexto, convirtiendo este contexto de nuevo en forma de preguntas como si de comenzar se tratase;
¿Fútbol? ¿Preparación física? ¿Prevención? ¿Lesiones? ¿Táctica? ¿Técnica? ¿Modelo de juego? ¿Método? ¿Procesos de entrenamientos? ¿Planificación? ¿Analítico? ¿Modelo integrador? ¿Periodización táctica? ¿Sistémico? ¿Jugadores? ¿Juego y jugar? ¿Entrenadores? ¿Formadores? ¿Cuerpos técnicos? ¿Sociedad? ¿Entrenar?, entre otros miles de interrogantes que desde el prisma de la duda no hacen más que afianzarme en la idea de que cuando creía que sabía algo, aparecen nuevos interrogantes que me vuelven a mostrar que cada vez sé menos.

-. Sé que esta pregunta es  muy amplia pero, ¿qué es para ti la preparación física?, ¿crees que algún elemento de la misma pueda primar sobre otro con unas consecuencias más visibles en el fútbol?
En primer lugar, no sé si deberíamos llamarlo “Preparador físico”, si deberíamos modificarlo a “Integrante técnico especializado en movimiento” o “Preparador del deportista”, etc.., en mi caso, es algo secundario si tenemos clara su funcionalidad. Una funcionalidad que ha creado una duda acerca de su propuesta debido a las innumerables muestras de “importancia” que nos hemos querido adjudicar sin ser meramente valorables.

 Un papel que no es ni más ni menos que el que se ha desarrollado a lo largo de los años desde los expertos en Actividad Física y del deporte, introduciendo en este maravilloso juego, un continuo reglaje de los parámetros de control y dando a entender, por un lado, la insensatez de aquellos que creían que iban a “mejorar su estado de rendimiento” exprimiendo a los jugadores a barbaridades físicas así como realizando una planificación magistral donde dicen saber ¿Qué?, ¿Cuándo? y ¿Cómo?, desarrollar sus prevalecedoras funciones, anteponiendo, e intentando justificar eso, a los aconteceres del juego.

No frecuento en mis actuaciones eso de exponer certezas, pero en un pensamiento en alto propondré una línea personal por donde entiendo que debería ir la actual corriente de preparación; “Intentar tener a todos los jugadores disponibles desde un mantenimiento de un estado óptimo saludable orientado al rendimiento, que la prevención de lesiones sea la base de nuestras propuestas, así como los aspectos condicionales predominantes en este deporte se adquieren mediante el juego, mejorándose en su práctica, y no alejado de la misma, fundamentos que pueden ser bien guiados desde las ciencias de la Actividad física y del deporte.

-. ¿Englobas la prevención de lesiones dentro de esa preparación física contextualizada o las tratas como un elemento más aislado?, ¿Crees que hoy se le da la suficiente importancia?
Habría que preguntarse dónde empieza o termina el trabajo de “Prevención de lesiones”, ya que no lo entiendo únicamente desde un guion de protocolos en función de recidivas o grupos musculares, articulares, control lumbo-pelvico, cadenas cinéticas etc…, sino que a mí se me ocurren una cantidad de factores controlables e incontrolables que intervienen mayormente para que dicho protocolo preventivo establecido sea positivo o negativo en dicho momento contextual. Quizás sean un cumulo de sensaciones, un cumulo de información solo reconocible con el conocimiento de la persona, “algo muy olvidado en el fútbol” o quizás algo que creemos controlar y lo controlamos descontroladamente.

-. Durante mucho tiempo quizá ha existido la necesidad de mostrar algo palpable a la hora de firmar con un equipo, como una planificación anual completa. Por lo que te he seguido y el trato que he tenido contigo, crees o ves la planificación como un elemento mucho más a corto plazo. ¿Aún hay gente que se “echa las manos a la cabeza” cuando le expones tu forma de entender la planificación?, ¿en qué basas esa idea?, ¿también se puede aplicar a la prevención de lesiones?
No pretendo desterrar la armonía que transmiten esos términos y fundamentos que nos hacen sentirnos fuertes e importantes, los cuales frecuentemente distancia la verdadera y única importancia de nuestra existencia: “Intentar mantener el colectivo en un estado óptimo de rendimiento en el esfuerzo, sin aparentes ni prevalecientes lesiones que impidan tener déficits estructurales en el grupo, así como en sus relaciones en el juego” y todo desde las sensaciones, percepciones, conocimiento de días y deseos del jugador, estados anímicos, circunstancias varías, como protocolo diario de actuación y realización, o sin embargo, mientras podemos seguir diariamente planteándonos el éxito o no de la “practicidad utópica”.

-. ¿Qué elemento del fútbol es para ti el que más debe tener en cuenta un preparador físico a la hora de orientar sus sesiones?, ¿se pueden trabajar todos los elementos?
Hablar de elementos, para mí es disonante, ya que no entiendo el entrenamiento desde la disociación de los elementos, sino que soy más de asociar. Para mí el futbol es un todo irreducible y desde esa visión intento realizar el desarrollo de mi practicidad. Leer para conocer, conocer para refrendar, refrendar aquello que mis jugadores muestran saber, saber que no se más allá de lo percibido, una percepción que me hace realizar una planificación de lo que hare mañana, un mañana que no será posible analizar sin las connotaciones del hoy.

-. Para terminar, ¿Qué hace al fútbol un deporte tan complejo en todas y cada una de sus parcelas?.
Citando a las teorías de la Complejidad y los Sistemas Dinámicos, el fútbol (y el futbolista) es un sistema complejo donde todas las partes forman parte del todo y el todo es condicionado y condiciona todas las partes.
En el ámbito del entrenamiento hemos pasado demasiado tiempo disociando las partes, analizándolas y entrenándolas y ahora resulta que no existen dichas partes, no se puede separar nada de nada, porque todo está unido, todo depende de todo y lo condiciona todo. 
Creo que nos hemos pasado demasiado tiempo corrigiendo, cuando lo que deberíamos haber hecho es observar más, observar qué hacen los jugadores, cómo reaccionan a los errores (propios y de sus compañeros) cómo comprenden el juego, cómo se relacionan entre ellos y cómo reaccionan a las indicaciones de su entrenador. Si hubiéramos observado tanto como corregido nos habríamos dado cuenta antes de que sí, el fútbol es complejo, y mucho más fácil de lo que nos pensamos.

-. Gracias por tu tiempo.

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