“Para correr y defender… me quedo en casa”.
ESCRITO POR NOSGUSTAELFUTBOL.COM
Conversaciones de fútbol.
En NosGustaElFutbol.com recopilamos una serie de
conversaciones de fútbol publicadas en el diario MARCA. En estas conversaciones, Ángel Cappa dialogará “sobre el juego,
alejándose de lo circunstancial e indagando en la esencia de este deporte” con
diversos personajes del mundo del fútbol.
Publicada en MARCA.
Iván de la Peña (Santander, 1976) es de esos jugadores que
ve mucho fútbol, que le apasiona. Y lo demuestra en esta charla con Cappa. El
grabador seguía e Iván no paraba. El cántabro se siente bien hablando de la
esencia de este juego.
CAPPA: Tú formas parte de una estirpe de jugadores, la de
los pasadores, que en Argentina se valoran mucho. Allí siempre un pase valió
más que un gol. Tú, como Guti, Riquelme o incluso Zidane, sufres no sólo la
rigidez táctica del fútbol actual sino el miedo y la tendencia a evitar el riesgo,
que es necesario en el fútbol.
DE LA PEÑA: Cada vez vamos a peor. Al final, el fútbol
terminará por hacer desaparecer este tipo de jugadores, que han pasado a ser un
problema y no una solución. Veo partidos de juveniles… y sólo buscan un
supuesto equilibrio. Ya nadie se atreve a hacer un regate.
C: Pero ojo, es un problema no sólo de los entrenadores,
sino también de los jugadores. Me acuerdo de un delantero que tuve en Perú, el
hijo del Cholo Sotil. Era un gambeteador nato. Pero en todos los entrenamientos
sus propios compañeros le protestaban por eso. Yo les decía a ellos: ‘si pongo
a éste, es para que gambetee, que es lo que sabe hacer’.
DLP: Hay muy pocos entrenadores que buscan tener la pelota.
Mira el caso de Guti. Ahora está jugando y Schuster le deja hacer lo que mejor
sabe: dar el último pase. Pero le ha costado mucho ser indiscutible en el
Madrid. Si a Guti le pides correr y trabajar, lo mejor es que no le pongas. Hay
que exigirle lo que sabe.
C: Es increíble que a este tipo de jugadores, como tú, os
desplacen a veces a los costados y os hagan jugar en banda, como a Iniesta o al
propio Guti. ¡Parecen un problema!
DLP: Es triste, por ejemplo, que Riquelme haya estado sin jugar.
No lo concibo, no tiene explicación. Y me sorprende que haya gente que critique
a Guti. Ya sabemos que tiene defectos, pero disfrutemos de su juego, pues no
hay muchos como él. Uno, como jugador, siempre puede perder la confianza. Si te
arriesgas a jugar en largo y la gente te pita al primer fallo, a la siguiente,
si no tienes confianza, igual ya juegas en corto, sin complicarte.
DLP: Ese miedo te cohíbe como futbolista. Hay pocos
jugadores que ya dejen su imaginación ahí dentro, que regateen o den un pase
interior. También los entrenadores de hoy en día sólo piensan en cómo cerrar
los espacios, en defender y no atacar. Y te confieso que me da rabia que gente
como tú o como Valdano no estéis ahora dentro del fútbol, entrenando. Siempre
veo que los mismos técnicos giran de un equipo a otro. Y vosotros, fuera. Es un
pecado para el fútbol. No lo entiendo.
C: Se entiende así, Iván: si yo voy a un club y en la
primera rueda de prensa digo que ‘voy a intentar jugar bien’… ya estoy
sentenciado. Ahora si digo que ‘el equipo va a luchar y trabajar’… ahí sí gano
crédito.
DLP: Ya, pero la cuestión es: ¿no trabaja quien intenta
jugar bien? ¿El Arsenal no trabaja? ¿El Barça no te presiona arriba para robar
la pelota?
C: Es como lo del doble pivote. Es difícil hacer entender
que la recuperación no depende sólo de dos jugadores. Ésa es una labor de todo
el equipo entero. Pero parece que tranquiliza más el jugador luchador que el
creativo…
“El Barça es diferente: todo lo hace con el balón y es lo
importante”
DLP: Debemos tener claro que el fútbol es un espectáculo y
la gente paga por verlo, por disfrutar… Yo juego al fútbol porque lo quiero
pasar bien. Si entro a un estadio a correr, a pensar en defender… para eso me
quedo en mi casa.
C: Quería hablar contigo sobre el asunto ése de ‘jugar
bonito’. Hay confusión sobre esto. Nadie se propone jugar bonito. La cosa es
jugar bien y eso, para los que nos gusta el fútbol, significa jugar bonito. Yo
no doy un pase porque es bonito, sino porque es eficaz para el juego.
DLP: Hay que dejarnos libertad a los jugadores. Si tengo que
tirar un caño y lo fallo, pues no pasa nada. Veo muchos jugadores que no saben
posicionarse, que incluso se colocan mal a la hora de recibir. Pero no lo
corrigen, quizás porque la gente no aprecia eso y no lo critica. Siempre es más
fácil criticar a los que se arriesgan con la pelota.
Iván de la Peña y Ángel CappaC: Yo me fijo en Xavi, Iniesta
y Fábregas. Su secreto, al margen de la técnica que tienen, es lo bien que se
posicionan en el campo. Para mí eso es saber jugar al fútbol. Siempre aparecen
en el lugar correcto.
DLP: Sí, pero lo que yo decía antes: no mucha gente se da
cuenta de esos detalles. Sólo perciben si has fallado un pase, etc.. Y, bueno,
todos fallamos.
C: Siempre cuento que tenía un jugador en Las Palmas que un
día tiró, sin ángulo, por el mero hecho de no ser criticado por la grada. Yo le
hablé y le dije: ‘Lo que has hecho -tirar- lo haría también el carnicero de la
esquina. Tú lo que tenías que hacer es amagar y luego tirar’. Si fallas, mala
suerte, pero no puedes hacer lo mismo que el carnicero. Me gustaría tratar
también el tema del esfuerzo. Para salir de las crisis parece que la única
salida es apelar al esfuerzo. ‘Hay que trabajar más, hay que echarle huevos…’.
DLP: Yo siempre me pregunto: ‘¿Qué pasa, que antes no
trabajábamos?’ Sería, si fuera así, para echarnos a todos. Lo que ocurre es que
la explicación pasa por otro sitio: no todo es ‘huevos y pelea’. Hay que
mejorar el juego. Los ‘huevos’ son un complemento. ¿No será que habrá que jugar
mejor?, me pregunto yo. Pero, Ángel, yo creo que todo esto que hemos hablado va
a ir a peor. Si no llegan entrenadores con otro concepto del fútbol, vamos a
peor. El fútbol perderá lo que le queda de espectáculo.
“Da rabia que gente como tú no entrene un equipo; ¡siempre
están los mismos!“
C: Sobre todo si en España no aprovechan la espectacular
generación que tienen y siguen apelando a la Furia.
DLP: Sí, pues si de furia y coraje se tratara, los escoceses
y los ingleses serían los mejores. Coraje hay que tener, sobre todo, para pedir
la pelota, creo yo.
C: Yo creo que cualquier jugador de Primera puede darle un
pase a un compañero, pero la cosa no acaba ahí…
DLP: … Claro, hay que intentar volver a ofrecerse. No vale
decir: ahí tienes la pelota… y olvidarte. Hay muchos jugadores que no tienen el
atrevimiento de jugar, de tocar. La única preocupación parece ser no perder la
posición para que no te pille mal parado. Hay técnicos que no te dejan mover,
que tienes que estar en un lugar fijo. No puedes ir y venir. Son demasiado
rígidos. En Italia, cuando llegué a la Lazio, me acuerdo que en un derbi
expulsaron a uno de la Roma. Íbamos 3-1 ganando, nos empataron a tres y casi
nos ganan. Al día siguiente discutimos en el vestuario de que si no tocábamos
la pelota con ese 3-1 y hacíamos correr al rival, ¿cuándo lo íbamos a hacer?
Pero no, los italianos nos dijeron que allí no se jugaba así: se jugaba a dar
dos toques y tirarla para arriba. ¡Y no jugábamos a nada! No te dejaban
presionar… sólo pensaban en defender. Por cierto, aquel derbi casi lo perdimos.
En el Barça, por ejemplo, es diferente: todo lo hacen con el balón y lo
importante es la pelota.
C: Es que la pelota sirve para defender también. Porque si
la tienes tú, el rival se desanima. Pero claro, si defiendes esto te ponen el
cartel de romántico.
DLP: Son etiquetas que te cuelgan y ya no te quitas nunca.
Yo quiero jugar bien para ganar el partido, no para otra cosa. Al que juega
bonito ya se le presupone que no va a ganar. Y no, aquí pierden todos. Y si
juegas mal, sólo te garantizas el aburrimiento y es difícil que ganes. Como
Brasil con Dunga. Su mentalidad no tiene nada que ver con el juego brasileño.
¡Y juegan muy aburrido!.
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