QUIÉN JUEGA AL ATAQUE……………GANA.


Así lo acaban de demostrar las dos Ligas del fútbol profesional colombiano.


Junior de Barranquilla después de 12 torneos logró conquistar su sexta estrella. Logrando imponer una identidad de juego que va de acuerdo con el gusto de su entrenador Diego Umaña. Fútbol agresivo, asumiendo riesgos, convencidos totalmente de que el gol es posible en cualquier cancha, juego colectivo montado para presionar arriba adelantando su última línea de cuatro a media cancha y jugando a sus espaldas con mucho espacio pero haciéndolo con orden, con criterio y seguridad. Fútbol de toque rápido, juego por bandas, de movimientos sincronizados, juego de posición y de posesión transiciones rápidas y seguras con acertado manejo del equilibrio en el medio juego. Fluctuando siempre entre un 4-4-1-1- o un 4-4-2.

En apenas cuatro meses logró dar solidez a su módulo de juego, y entregándole a su inmensa fanaticada además de un título el gusto de estar representado por un equipo que colmaba sus gustos futbolísticos. A los hinchas del Junior les encanta que su equipo juegue al ataque, que no especule, quiere cambios atrevidos y un juego de toma de iniciativa desde el primer minuto al final del partido.

Junio 2 del 2010 entregó con merecimientos el título a un equipo que ganó, gustó y muchas veces goleó. Con una defensa entre las mejores tres y un ataque entre los dos mejores del campeonato. Esas cifras lo dicen todo, ratificando sus intenciones futbolísticas.

Para el segundo semestre el Once Caldas de Manizales, se coronó también con sobrados méritos Campeón de la Liga profesional del fútbol colombiano, al mando del entrenador Juan Carlos Osorio. Un equipo que metía miedo por su ataque y su contundencia. Arrancó con un 4-3-3 y metía en cualquier momento variantes tácticas según las necesidades del juego. Muchas veces jugó 3-4-3 o 4-4-2.

Mostró una identidad de juego que va con el gusto de su entrenador forjado en el Manchester United de Inglaterra. Extraordinario juego de velocidad y transiciones rápidas. Juego directo, juego colectivo de movimientos precisos y sincronizados, juego por bandas vertiginoso. Defensa fuerte, segura y acertado manejo de los conceptos defensivos, sin miedo de salir a media cancha a respaldar el medio juego.

Con jugadores desequilibrantes de media cancha hacia adelante como Vélez y su proyección por banda y diagonales con gol, Valencia de manejo y media distancia mortífera, Dayro Moreno goleador merecido del campeonato, Uribe de movimientos inteligentes y definición certera, el trajinar de Arias, la levantada de nivel progresiva de Castrillón; bueno un equipo convencido de salir a la cancha a convertir goles, y si son de visita mucho mejor.

Títulos ganados con limpieza, con fútbol claro, sin mañas, sin enredos, sin reclamos. Poniendo la propuesta honesta en el terreno de juego e imponiéndola con esfuerzo, buen fútbol, respeto por el espectáculo.

Los dos entrenadores ganadores de los títulos en el 2010, han declarado muchas veces de que son seguidores a muerte del fútbol inglés. Del fútbol que nos gusta a todos. Y lo demuestran con su trabajo semanal y con la propuesta futbolística que hacen fecha a fecha en los torneos colombianos.

¡ Qué viva el fútbol de ataque, carajo ! Felicitaciones Umaña y felicitaciones Osorio. Gracias al profesor Torres del Deportes Tolima su fútbol me encanta, ya recibirá su premio. Siga por ese camino. Usted engrandece el fútbol nuestro.